Más que nunca, las empresas necesitan adaptarse y evolucionar para mantenerse competitivas y eficientes.
Una de las decisiones críticas que los directores de tecnología deben tomar es la selección de la infraestructura tecnológica adecuada para las operaciones de sus negocios.
Elegir entre soluciones en las instalaciones y en la nube es una decisión estratégica importante. Esta elección afecta la seguridad, la escalabilidad, la gestión de costes y la agilidad de la empresa. No es solo una preferencia tecnológica.
En este artículo, exploramos las diferencias clave entre estas dos opciones y evaluamos sus ventajas y desventajas para ofrecer una orientación práctica sobre qué solución podría ser la más adecuada.
On premise vs. cloud, factores a considerar
Una empresa cualquiera, con operaciones en múltiples sectores que ha comenzado a expandirse, necesita actualizar su infraestructura de IT y decidir si seguir utilizando una solución On Premise o migrar a la nube.
¿Qué debería tener en cuenta en el nuevo contexto de cloud computing?
Vamos a verlo con detalle:
Seguridad
La seguridad es uno de los aspectos más críticos de cualquier infraestructura tecnológica. Implica proteger los datos contra accesos no autorizados, pérdidas o robos. En concreto:
- Proteger la pérdida de datos. La pérdida de datos se puede producir por dos motivos: porque una empresa se abre a internet y hay amenazas o porque el hardware falla. Una empresa no es una entidad cerrada, sus procesos van más allá de ella misma. Necesita colaborar con clientes, empleados, proveedores, administraciones públicas y esto hace que tenga que estar abierta a internet. Por otro lado, el hardware son máquinas que pueden quedar obsoletas o fallar. La seguridad de la empresa ha de ir a cubrir las posibles contingencias que esto genere y esto se traduce en al menos en estos puntos:
- Copias de seguridad: es la herramienta más útil contra una pérdida de datos. Hay cuatro parámetros que condicionan:
- La información a copiar: dependiendo de las necesidades del negocio, la empresa tendrá que decidir si copia solo la base de datos, una parte específica del sistema de archivo o la totalidad de la máquina.
- Frecuencia para crear las copias de seguridad: es esencial que la empresa haga copias con una periodicidad adecuada para evitar la pérdida de datos relevantes. Una copia desactualizada no es útil.
- Ubicación de las copias de seguridad: la empresa también se debe preocupar por almacenar las copias en lugares seguros y accesibles. Una copia inaccesible, como si estuviera encriptada por ransomware, sería inútil en caso de emergencia.
- Restauración de datos: es importante tener claros los pasos y los tiempos para restaurar la información. Sobre todo, en caso de emergencia.
- Copias de seguridad: es la herramienta más útil contra una pérdida de datos. Hay cuatro parámetros que condicionan:
- Establecer Políticas de acceso y de autenticación: la gestión de usuarios y sus accesos es otro aspecto crítico de la seguridad de datos. Definir un directorio activo, marcar políticas de contraseñas robustas, gestionar los accesos a los directorios y utilizar herramientas como redes virtuales privadas o autenticación de doble factor son medidas básicas para prevenir accesos no autorizados que comprometan la seguridad de los datos.
Teniendo esto en cuenta, la empresa en cuestión, deberá decidir cuál de las siguientes opciones en términos de seguridad le conviene:
On Premise: para la empresa de este caso práctico, la opción On Premise ofrece ventajas, pero también una preocupación compartida por muchos negocios: la seguridad de los datos. De hecho, el 58 % de los empresarios que utilizan soluciones en la nube ven los ciberdelitos como su principal amenaza. En general, perciben los sistemas On Premise como más seguros porque la empresa tiene control directo sobre los datos y puede implementar medidas de seguridad físicas y digitales específicas según sus necesidades.
No obstante, la empresa debe definir sus necesidades, responsabilizarse de los datos y destinar recursos internos o externos para su gestión. Esto incluye personal para la definición de los datos críticos, creación de planes de contingencia, adquisición de licencias de software para copias, ubicaciones donde almacenar copias o realizar restauraciones, disponer de hardware donde restaurar, y definir las políticas de acceso, entre otros.
En resumen, esta opción implica que la empresa asume toda la responsabilidad por la protección de sus datos, lo que puede requerir gastos adicionales, profesionales dedicados y recursos especializados que quizás la empresa no tenga a su disposición.
Cloud: los proveedores de nube invierten muchos recursos en mantener la seguridad actualizada, por lo que pueden ofrecer soluciones avanzadas que a menudo están fuera del alcance de empresas individuales. Sin embargo, esto implica confiar en el proveedor para gestionar la seguridad, lo que puede preocupar a algunas empresas, que ven reducido su control sobre su propia información.
Un buen servicio de nube debe permitir crear instancias, integrarlas en la red, realizar copias de seguridad, descargarlas, restaurarlas y definir cortafuegos. En una nube privada, la empresa debe definir sus políticas utilizando las herramientas del proveedor, similar a un entorno On Premise. En una nube híbrida o pública, el proveedor gestiona estas operaciones, y la empresa solo debe asegurarse de que las políticas del proveedor se alineen con sus necesidades y pagar la cuota acordada.
Los proveedores de nube ofrecen seguridad robusta y herramientas esenciales, pero las empresas deben decidir entre el control de una nube privada y la gestión simplificada de una nube pública o híbrida.
Presupuesto
La decisión entre soluciones On Premise y en la nube tiene grandes implicaciones financieras que toda empresa debe considerar.
On Premise: las soluciones On Premise generalmente requieren inversiones iniciales sustanciales para hardware, instalaciones y personal, así como costes continuos de mantenimiento y actualización.
Esta inversión incluye la compra de hardware, el consumo de energía, las licencias de software y el equipo de IT. Estos costes pueden ser prohibitivos para las PYMES y pueden limitar la capacidad de la empresa para reaccionar rápidamente a las necesidades del mercado.
Cloud: las soluciones de software en la nube permiten un modelo de pago por uso, lo que reduce los costes iniciales y convierte los gastos de capital en gastos operativos. Así, se permite una estructura de costes más predecible y escalable según el uso real.
Las empresas pueden ajustar sus gastos en función de la demanda y el consumo, lo que puede dar como resultado menores costes operativos y de mantenimiento. Se trata de un modelo que es especialmente atractivo para empresas con recursos limitados o aquellas que desean evitar grandes desembolsos de capital.
Si quieres ver un caso práctico en el que comparamos las dos opciones, te recomendamos revisar este artículo: ¿SAP Business One en la nube o en local? Caso práctico
Escalabilidad
La capacidad de adaptar la infraestructura tecnológica a medida que crecen o cambian las necesidades del negocio es fundamental.
On Premise: las soluciones On Premise pueden limitar la rapidez con la que una empresa puede escalar debido a la necesidad de adquirir y configurar hardware adicional. Esta limitación puede convertirse en un obstáculo significativo en entornos de rápido crecimiento o en situaciones donde se requieren ajustes rápidos en la capacidad.
Cloud: la nube ofrece una escalabilidad prácticamente ilimitada, permitiendo ajustar los recursos rápidamente según las necesidades del negocio. Esta flexibilidad es ideal para manejar picos de demanda o crecimiento, y es altamente escalable y flexible. Las empresas pueden incrementar o reducir su capacidad sin las limitaciones físicas y logísticas asociadas con las soluciones On Premise.
De hecho, no es necesario pensar en escenarios complejos, como decidir qué infraestructura usaríamos si nos expandimos a otro país. Algo tan sencillo como quedarnos sin espacio en el disco duro de uno de nuestros servidores ya puede ser un problema significativo, especialmente si ese servidor está ejecutando nuestro sistema ERP.
En una situación así, comprar un nuevo disco (o varios, si están configurados en RAID), detener el servidor, instalar los nuevos discos y reinstalar el software no es un proceso rápido. Sin embargo, todas estas acciones se pueden llevar a cabo en una infraestructura en la nube sin necesidad de detener el funcionamiento de nuestros sistemas.
La nube permite una escalabilidad y flexibilidad que no se logra con servidores locales, ya que podemos añadir almacenamiento adicional o recursos de manera casi instantánea y sin interrumpir el servicio a los usuarios. Esto asegura que nuestro ERP y otros sistemas críticos continúen funcionando sin interrupciones significativas, incluso frente a problemas de hardware.
Cumplimiento Legal
El cumplimiento legal y regulatorio es una preocupación crucial para muchas industrias, especialmente aquellas que manejan datos sensibles o están sujetas a regulaciones estrictas.
On Premise: las soluciones On Premise pueden ofrecer a las empresas un mayor control sobre sus datos, lo cual es necesario para cumplir con regulaciones específicas que exigen un control total sobre los datos.
Cloud: muchos proveedores de nube están certificados para cumplir con rigurosos estándares de seguridad y privacidad, haciendo que la nube sea una opción viable incluso para entornos regulados. Sin embargo, la transferencia de datos a la nube debe realizarse con cuidado para asegurar el cumplimiento continuo de las regulaciones.
Si quieres conocer nuestra opción favorita, respaldada por nuestro equipo de expertos, siempre recomendamos la versión Cloud de SAP Business One. No tendrás que preocuparte de la seguridad de tus datos, de las actualizaciones o de la barrera de entrada.
Comparación de opciones
¿Sigues con dudas? Pensemos por un momento en las opciones que se presentan.
Mantener sistema On Premise
Mantener el sistema On Premise es una opción viable para empresas que necesitan un control total sobre su infraestructura y datos.
Ventajas: control completo sobre servidores, hardware y software; mayor control sobre la seguridad y el cumplimiento normativo; los datos permanecen dentro del entorno controlado de la empresa, lo cual es crucial para manejar información extremadamente sensible.
Desventajas: costes iniciales significativos; necesidad de personal técnico cualificado para el mantenimiento y gestión del sistema; limitaciones en la escalabilidad; inversiones adicionales en hardware y actualizaciones continuas.
Migración completa a la nube
Recomendada para empresas que buscan reducir costes y mejorar la eficiencia operativa, con menos necesidad de control directo sobre la infraestructura.
Ventajas: eliminación de la necesidad de invertir en hardware; reducción de gastos asociados al mantenimiento y actualización; escalabilidad fácil y rápida; facilita el trabajo remoto permitiendo acceso a aplicaciones y datos desde cualquier lugar.
Desventajas: preocupaciones sobre la seguridad de los datos y el cumplimiento de normativas; dependencia de la fiabilidad y estabilidad del proveedor de servicios en la nube.
Solución híbrida
Una solución híbrida combina lo mejor de ambos mundos, permitiendo a la empresa mantener el control sobre los datos críticos mientras aprovecha la flexibilidad y escalabilidad de la nube.
Ventajas: mantiene los datos críticos On Premise para mayor seguridad y control, mientras que otros datos y aplicaciones se alojan en la nube para aprovechar su escalabilidad; equilibrio entre el control de costes operativos y la inversión en infraestructura; seguridad y acceso diseñados según las necesidades específicas de diferentes tipos de datos y aplicaciones.
Desventajas: requiere una gestión cuidadosa y coordinación entre los recursos en la nube y On Premise; necesidad de un equipo de TI más sofisticado y experimentado para gestionar y asegurar dos entornos diferentes.
Tabla Comparativa
Para tu comodidad, aquí tienes una tabla que resume lo que hemos abordado en este artículo, de forma que puedas ver rápidamente qué opción te conviene más.
Factor | On Premise | Cloud |
Seguridad | Control directo sobre los datos Responsabilidad total de la información | Seguridad avanzada y actualizada Economías de escala |
Presupuesto | Gran inversión inicial en hardware, instalaciones y personal Costes continuos de mantenimiento y actualización | Modelo de pago por uso, menores costes iniciales Estructura de costes más predecible y escalable |
Escalabilidad | Limitaciones para escalar | Escalabilidad ilimitada Ajuste rápido de recursos |
Cumplimiento Legal | Mayor control sobre los datos | (Cada vez más) Estándares rigurosos de seguridad y privacidad |
Conclusión
No hay una solución que se ajuste a todas las empresas. Cada una tiene sus particularidades y necesidades y deben tenerse en cuenta.
Aunque la opción híbrida siempre parece la mejor idea en el papel, ya que ofrece la flexibilidad necesaria para mantener el control sobre los datos críticos y sensibles, mientras se aprovechan los beneficios de escalabilidad y eficiencia de la nube para otros aspectos menos críticos, no siempre es la solución única.
Cada negocio debe evaluar cuidadosamente sus necesidades específicas, su nivel de control sobre los datos, sus requisitos de seguridad y cumplimiento legal, así como su capacidad para adaptarse a cambios en la demanda y el crecimiento empresarial.
La decisión debe ser informada por una evaluación exhaustiva de los riesgos y beneficios de cada opción, y alineada con los objetivos y necesidades específicas de la empresa. Considerar tanto las necesidades actuales como la capacidad de adaptación y crecimiento futuro es esencial para tomar una decisión estratégica acertada.
Si estás planteándote modernizar la infraestructura de tu empresa o necesitas asesoramiento sobre la mejor opción en tu caso, contáctanos: podemos ayudarte.